- El estudio hidrodinámico de un lecho fluidizado líquido-sólido
- Modo de funcionamiento de un lecho bacteriano
- El estudio de las magnitudes que influyen: caudal, masa y carga superficial del filtro percolador
Los microorganismos fijados eliminan la materia orgánica mediante la absorción de componentes solubles y suspendidos. A medida que crecen los microorganismos, aumenta el espesor de la película y se forma una película de dos capas aeróbica y luego anaeróbica. En esta segunda parte, los mecanismos endógenos y los gases producidos conducen a desprendimientos locales del biofilm que liberan áreas disponibles para una nueva colonización. Este fenómeno de desprendimiento de la biopelícula o "autolimpieza" es esencialmente una función de las cargas orgánicas e hidráulicas aplicadas al filtro.
El oxígeno necesario para el metabolismo aeróbico se suministra mediante tiro natural o ventilación forzada.
El líquido recogido a la salida de la biopelícula alimenta un decantador secundario en el que los lodos producidos se separan del agua tratada. Parte del líquido recolectado se recicla con frecuencia a la cabeza del lecho bacteriano para diluir el afluente y asegurar una humectación suficiente de la biopelícula. Principal proceso de purificación biológica en la década de 1950, los filtros percoladores tienen una serie de ventajas sobre los lodos activados
- menos seguimiento;
- ahorros de energía significativos (sin soplado de aire);
- "recuperación" bastante rápida después de un choque tóxico;
El controlador consta de: